Jeff Bezos, el fundador de Amazon, y la expresentadora Lauren Sánchez sellaron su matrimonio este viernes con una lujosa ceremonia en Venecia, Italia. Aunque ya se habían casado por lo civil en Estados Unidos, la pareja eligió la exclusiva isla de San Giorgio Maggiore -frente al Arsenal veneciano- para intercambiar votos y anillos en una celebración rodeada de lujo, celebridades y atención mediática.
La boda fue el cierre de una semana repleta de eventos y fiestas que incluyeron superyates, cenas privadas y estadías en el hotel Aman, un palacio renacentista con tarifas que superan los 2000 euros por noche. La elección del lugar no pasó desapercibida: además de turistas que ya abarrotan la ciudad, la celebración generó tanto fascinación como rechazo entre los residentes, que denunciaron el impacto ambiental y social de eventos de este calibre.

A la par de los festejos, Italia enfrenta la primera ola de calor del verano europeo. El gobierno declaró la alerta roja en 21 ciudades, entre ellas Venecia, advirtiendo que las altas temperaturas pueden afectar incluso a personas sanas.
A pesar del calor extremo, la boda se desarrolló con normalidad. El momento más emotivo fue la actuación en vivo de Matteo Bocelli, hijo del reconocido tenor Andrea Bocelli, quien interpretó varias canciones durante la ceremonia.
La combinación de glamour, clima extremo y críticas sociales convirtió a esta boda en uno de los eventos más comentados del año en Europa.

Lauren Sánchez eligió para su enlace un espectacular vestido estilo sirena de Dolce & Gabbana.
El vestido de Lauren Sánchez: encaje italiano, homenaje a Sophia Loren y más de 900 horas de trabajo artesanal
Para su boda con Jeff Bezos, Lauren Sánchez eligió un impactante vestido de novia de Dolce & Gabbana Alta Moda, que presentó en exclusiva para la portada de julio de Vogue. El diseño, confeccionado a mano en el atelier de la firma en Milán, demandó más de 900 horas de trabajo artesanal y se inspiró en la estética clásica de los años cincuenta.
Con silueta sirena, cuello alto, mangas largas y corset entallado, el vestido está hecho en encaje blanco italiano y rematado con una hilera de botones de seda que recorre la espalda hasta una falda de gran caída. Según contó la propia Sánchez, el modelo rinde homenaje al icónico vestido que lució Sophia Loren en la película Houseboat (1958): “Vi a Sophia Loren en una foto, con las manos en posición de oración y un vestido de encaje hasta el cuello, y dije: ese es el vestido”.
La pieza, elegante y de aire cinematográfico, se convirtió en uno de los elementos más comentados de la ceremonia.
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