26/09/2025 14:33hs.
Aunque Guillermo Benítez aclare que «no podemos ser el Manchester City o el Barcelona», la primera vez de Deportivo Riestra en el Monumental será como líder de su zona en el Clausura y con un impresionante invicto de 25 partidos como local. Más Guapo que nunca y con el objetivo de no descender ya cumplido, la ilusión de dar el batacazo ante un golpeado River está latente, aunque el entrenador no le cambiará ningún ingrediente a su receta a pesar del contexto y las ganas de hacer más historia: «Tengo mucha fe…».
Contra Racing, en el 0-3 por los octavos de la Copa Argentina, el Tata aprendió la lección. Quiso arriesgar, jugar de igual a igual y reconoció que cometió «un error muy grave». Para evitar tropezar dos veces con la misma piedra, ya les dijo a sus jugadores que «no hay que hacer lo mismo con River». Y en el afán de neutralizar a un equipo de Marcelo Gallardo más obligado que nunca a ganar en casa post eliminación de la Copa, fue más allá del clásico micro debajo del arco.
«Tenemos muy pocas chances de mantener mucho tiempo la pelota. Hay que poner un buen tren para que no puedan entrar y complicarle la tarde a River. Es lo que queremos y lo que vamos a proponer. Tratar de hacer un partido duro y friccionado, cortándole continuamente los circuitos», detalló en charla con F12 (ESPN), sin misterios a pesar de enfrentar a un rival que tiene un plantel «de Selección» y que lo dirige un entrenador por el que siente «devoción».
Si algún futbolero quiere disfrutar de un equipo con tenencia del balón y remates automatizados, Riestra no cumple con esos requisitos. «Somos el equipo que menos patea al arco y el que menos pases ha generado, nunca juntamos más de 10», reconoció Benítez, que no luce preocupado porque su equipo sabe a lo que juega, con los parlantes a todo trapo: «Somos directos. Tenemos que ser rock o música electrónica, tratar de ser intensos y llenar el área de jugadores. También somos el tercer equipo que más goles hizo en el semestre. Si nos dio resultado, por qué cambiarlo».
Hace menos de un año en el cargo, pero con una década vivida en el club, a Benítez le tocó ascender y hoy disfruta de este momento soñado. Al menos por una temporada estará en Primera, pero no quiere ni pensar en una copa internacional porque «me estaría equivocando y haría confundir a los jugadores». Considera primordial engrosar el promedio, correr, meter, nutrirse de jugadores del Ascenso y mantener el plan que nos viene «dando de comer» hasta que termine el campeonato». Porque para crecer, primero hay que conocer las limitaciones.
«Si nosotros nos ponemos a querer jugarle como el City a River, seguramente la vamos a pasar mal. Acá no tenemos ego, lo cortamos enseguida».
Fuente: Olé.com.ar
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