
El 14 de junio de 1982 marcó el fin de la Guerra de Malvinas, último enfrentamiento armado entre Argentina y el Reino Unido por la soberanía de las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur.
A 43 años de aquella jornada, el país recuerda con respeto y pesar a los más de 600 soldados argentinos caídos, y mantiene vivo el reclamo soberano por vías diplomáticas, en un compromiso inclaudicable con la memoria colectiva.
La guerra tuvo su inicio el 2 de abril de 1982 con la denominada “Operación Rosario”, un desembarco argentino que recuperó momentáneamente el control de las islas y forzó la rendición de las autoridades británicas. El conflicto bélico se desarrolló durante 74 días y culminó con la rendición de las tropas argentinas en Puerto Argentino el 14 de junio.
Aquel enfrentamiento fue consecuencia de un conflicto por la soberanía iniciado en 1833, cuando fuerzas británicas desalojaron a las autoridades argentinas establecidas en las islas. Casi 150 años después, el gobierno militar de Leopoldo Fortunato Galtieri formalizó la declaración de guerra al Reino Unido desde un palco montado en Plaza de Mayo, con el respaldo de miles de ciudadanos que, por entonces, no alcanzaban a dimensionar la magnitud del desenlace.
Durante la contienda participaron aproximadamente 23.000 efectivos argentinos: 10.300 del Ejército, 10.600 de la Armada, 2.300 de la Fuerza Aérea y unos 200 de Gendarmería y Prefectura. Entre los hechos más dolorosos se destaca el hundimiento del crucero ARA General Belgrano, el 2 de mayo, con 323 marinos muertos. Fue, hasta hoy, uno de los mayores golpes sufridos por la Argentina en alta mar.
Los combates se intensificaron a partir del desembarco británico en San Carlos, el 21 de mayo. De allí en adelante se sucedieron enfrentamientos clave en Monte Longdon, Tumbledown, Sapper Hill y Pony’s Pass. El 14 de junio, sin más resistencia posible, las fuerzas argentinas se rindieron.
La guerra dejó como saldo 649 militares argentinos muertos y más de mil heridos. A ello se suma una de las consecuencias menos visibilizadas pero profundamente dolorosas: los suicidios de excombatientes, que organizaciones estiman entre 350 y 450 casos. Estas cifras son parte del drama humano que persiste más allá de la cronología bélica.
Cada 2 de abril, desde el año 2000, Argentina conmemora el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas, una fecha establecida por la Ley 25.370 durante el gobierno de Fernando de la Rúa, que busca honrar la memoria, el coraje y el sacrificio de quienes combatieron por la Patria.
A 43 años del final del conflicto, el reclamo por la soberanía continúa siendo una política de Estado. Lejos de la vía armada, la causa Malvinas sigue vigente en foros internacionales, en las aulas, en los homenajes y en la conciencia de un país que no olvida.
Fuente: InfoZona
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