El trasfondo de la novela por el arco de San Lorenzo

No es un problema nuevo para San Lorenzo el tema del arco. Durante el 2024 lo padeció: no consiguió tener un titular indiscutido e incluso hubo cuatro nombres que se pusieron los guantes a lo largo del año: Facundo Altamirano, Gastón Gómez, Mateo Clemente y Orlando Gill. El puesto es, para Miguel Ángel Russo, una prioridad, pero hasta el momento no encuentra al indicado y el tiempo empieza a apremiar.

Apenas terminó el mercado empezaron a correr varios nombres, pero solamente uno perduró en el tiempo: Washington Aguerre, quien terminó su contrato con Peñarol el 31/12 (aunque negocia la renovación mientras escucha otras ofertas), y es el gran elegido del entrenador azulgrana. Sin embargo, desde lo económico es una opción muy difícil de concretar para el Ciclón.

En el medio, sorprendió un nombre que surgió desde el otro lado del Atlántico. ¿Quién? Andries Noppert, neerlandés de 30 años que está teniendo poca continuidad en SC Heerenveen de la Eredivisie y le encantaría mudarse a Argentina. «Me gustaría jugar en San Lorenzo», reconoció quien fuera el arquero titular de Países Bajos en el Mundial de Qatar.

Más allá que con el europeo las charlas avanzaron y hasta se llegó a un principio de acuerdo sobre su contrato, Russo no está del todo convencido de sumar a un arquero que ni siquiera habla español y la chance quedó en stand by.

Este lunes, llamativamente, fue ofrecido otro europeo: Benjamín Lecomte, francés de 33 años que es titular en el Montpellier y tiene pasado en España, lo que solucionaría el temita del idioma. Estuvo en el Espanyol de Barcelona y en Atlético Madrid, por eso desde Boedo se contactaron con el cuerpo técnico del Cholo Simeone para conocer referencias y lo que escucharon fue más que positivo…

La cuestión es que apenas un rato después de la historia del arquero francés, el Ciclón salió en Montevideo a disputar su primer amistoso de pretemporada y Altamirano sufrió la fractura del cúbito de su brazo izquierdo tras un choque con Herazo (ex San Lorenzo) por lo que deberá ser operado y estará cerca de cuatro meses fuera de las canchas.

Entonces, además de los juveniles Mateo Clemente (22 años) y Demian Talavera (17), al técnico la única opción que le queda para el puesto es Orlando Gill, el paraguayo de 24 años que viene de hacer buenos partidos en Reserva pero que en Primera solo disputó los 90 minutos frente a Tigre de la última fecha del campeonato y recientemente la segunda mitad de la victoria ante Nacional de Uruguay.

Altamirano había avisado que tenía intenciones de quedarse para revertir la mala imagen que dejó en los hinchas su nivel del año pasado, aún si llegaba otro jugador en el puesto… Pero ahora, su lesión, que lo hará perderse casi todo el semestre, acorta los tiempos que tienen en Boedo para reforzar un sector clave. Por eso, hasta reapareció en escena Chila Gómez, quien estuvo a punto de acordar su llegada a Barracas Central pero se pinchó y algunos evalúan la posibilidad de repatriarlo.