COLUMNA DE OPINIÓN: PARO Y MOVILIZACIÓN, CRÓNICA DE OTRO DÍA COMPLICADO PARA LA GESTIÓN M
Cómo ya es costumbre en
estas fechas los argentinos nos
preparamos para otra jornada febril de paro y movilización.
Organizaciones sociales y sindicatos llevan adelante una nueva medida de fuerza
contra el gobierno de Mauricio Macri.

Si bien el gobierno buscó moderar
el impacto del paro dictando la conciliación obligatoria en gremios
relacionados con el transporte, es otro golpe a un muy debilitado gobierno
nacional.
El paro, al cual no adhirió la CGT, llega
en unos de los peores momentos políticos y económicos de la administración de
Cambiemos.
El deterioro de las variables económicas que obligó al gobierno a recurrir a medidas que contradicen a claras luces los paradigmas en los que cree, cómo los controles de precios que buscan amortiguar los efectos de una inflación indomable.
A la gestión M se les
fueron de las manos todas las variables, y aunque intente aparentar fortaleza y
estabilidad todos sabemos que la situación actual es consecuencia de los
errores garrafales que ha tenido en
materia económica.
Los discursos de los referentes sindicales criticaron duramente el rumbo
económico y acusó al gobierno de ser el artífice de los males actuales de la
economía, lo cual a grandes rasgos es cierto. Ahora bien, si analizamos la
connotación política del paro, aparece la raíz partidista, cómo es natural, pero
tenemos que poner en la lupa algunos puntos que no podemos soslayar en nuestro
análisis.
Desde 2011 a esta parte Argentina esta en una recesión que parece no tener fin,
lo cual se debe a muchos factores, entre
ellos, algunos de los oradores que estuvieron en el acto tienen mucho que ver.
Por ejemplo el señor Pablo Moyano está acusado de manejar su gremio con
amenazas y extorsiones, ese tipo de prácticas
contribuyen a que exista distorsiones
en el mercado laboral y a que haya un 10% de desempleo, los sindicatos
son unas estructuras que defienden mucho más a los partidos políticos que a los
trabajadores, además tienen un discurso absolutamente anacrónico, que aleja la
discusión sobre el trabajo del eje que debería tener y no plantearse; ¿La
estructura laboral argentina está preparada para los cambios que está experimentando el mundo del
trabajo?, ¿Cómo aumentar la productividad?, ¿Cómo lograr una economía sea
más competitiva?.
Nada de esto se discutió, en una jornada donde hubo decenas de detenidos por destrozos… simplemente una nueva jornada de movilización.
